Se van acercando un año más estas fiestas que tanta nostalgia y tristeza a la vez me traen, me vienen de golpe a mi cabeza tantos buenos recuerdos, una familia unida entorno a una mesa puesta con ricos y maravillosos platos que mi madre nos preparaba, su afán de decorar toda la casa con espumillón y bolitas, hasta por las lámparas lo ponía :) tocaba sacar el árbol y lo adornaba precioso, que ilusión me entraba al participar en esa tarea tan mágica. Desde siempre me hicieron sentir ese espíritu navideño del cual a día de hoy carezco, ¡lástima pq me hacia sentir plenamente feliz! recuerdo como llegaban a casa cientos de regalos para mi padre por el puesto que desempeñaba y que años más tarde comprendí el pq le hacia enfadar un poquito aquellos presentes, ERA TAN LEGAL EN TODO que jamás consideró que los tuviera que recibir y más de aquella manera tan desbordante, recuerdo un portero de la casa que en aquel tiempo había que estaba alucinado el hombre, hasta que se percató para dónde entraba tanto regalo, estaba en la idea de que por lo menos había un ministro en la comunidad jaja..
Por otro lado, ver como las calles se vestían de luces de colores, arbolitos adornados y música navideña por dónde quiera que fueras, esa ilusión de comprar los regalos para mis padres y que alguna vez me pillaba el toro desprevenida jeje, pero siempre llegaba a tiempo y acertada (que ya era difícil pq tenían prácticamente de todo, lo que suponía siempre un problemón)..
Lo cierto es que incluso recordando todo aquello que un día me hizo ser tan feliz, se me pone un nudo en la garganta difícil de quitar, pero a veces necesito sacarlo fuera a través de unas pocas letras pues no me gusta cargar mis tristezas sobre nadie, no sería justo para nada pues supongo que casi todos llevamos una pena o dolor dentro para tener que soportar una más.
Siempre que llegan los días clave pienso y me digo para mis adentros ¡ cuánto daría yo por dormir un largo sueño y despertar justo cuando todo haya acabado, sería perfecto!
Es la lucha de cada año, enfrentarme a una realidad que no quiero, sentirme doblemente sola en compañía (y que es la peor soledad) es como tener la sensación de NO encajar en ningún lado pues cada cual tiene formada su propia familia, y la mía, la que verdaderamente tenía y me hacía sentir sin esa soledad, ya no está, ¡daría un montón de años de mi vida por tener a mi lado a los dos seres que más he querido en mi vida y sentir nuevamente dónde está mi sitio!
A veces me dicen eso de ¡ESTOS DÍAS SON COMO CUALQUIERA DEL RESTO DEL AÑO! y no estoy de acuerdo, en estos días se notan más, mucho más las ausencias, la nostalgia y tristeza se apodera de un@ de manera increíble, no sólo nos acordamos en estas fechas de los que nos hacen tanta falta (al menos no en mi caso) yo los tengo presentes siempre y de hecho casi siempre hay una velita al lado de su foto para que descansen y los sienta cerca de mí, pero en estos días hay un recuerdo mucho más intenso, de esos que duele y te aprieta el corazón de tal manera que hasta cuesta respirar. Solo quiero que pasen rápido, no quiero pensar, no quiero sentir tanto dolor, solo quiero dormir y salir de las tinieblas que hacen que cada día me sienta más y más perdida...
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